En esta ocasión, el destino fue un recorrido por Olite, Ujue, y las Bardenas reales ese mágico y peculiar paraje tan parecido a las películas del oeste americano; desconocido para muchos de nosotros.
(Foto: Pili Aguayo)
Navarra tiene un encanto especial, ya que podemos encontrarnos tanto con pueblos medievales, como en desiertos. Como prueba, Las Bardenas Reales Reserva de la Biosfera por la UNESCO.
Por mañana nos dirigimos hacia Olite y Ujue, Carcastillo lugar este último, donde se encuentra el Monasterio de la Oliva, fundado en 1149 por la orden del Cister, pudimos ver a los mojes que habitan el monasterio, haciendo sus liturgias. Más tarde nos dirigimos a Tudela donde paramos a comer y charlar animadamente, y allí, encontrarnos con los guías que nos llevarían hasta las Bardenas.
El viaje fue divertido gracias a que Pili Aguayo como si fuera una guía más llevo un “jeep”. Sin más demora nos pusimos en marcha, fuimos parando a medida que el guía principal veía algo interesante que fotografiar. Reconozco que fue escaso el tiempo que tuvimos para hacer fotos porque todo estaba cronometrado. Todos nos quedamos con ganas de hacer fotos o simplemente de disfrutar del lugar. Supongo que podremos repetir la experiencia en otra ocasión.
Gracias a todos por asistir
La comisión de quedadas
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